Y aún recuerdo…después de tantos milenios en el exilio…
todas las veces que recogí caracoles transparentes,
y traté de envolverlos con la arena mojada y la espuma blanca,
para llevarlos a tu lecho de gardenias al llegar el alba!
Pero me perdí en el camino a tu mirada...
y lloré como una niña (que en su anhelo),
te cantó como un jilguero en vuelo
sobre los cielos azulados de tus sueños!
Pero de pronto la tarde se muere y llega la noche
…y entonces me invadió el silencio!
Eileen
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